Bolívar: Falta de inclusión para discapacitados en la infraestructura pública local

Las personas con discapacidades motrices tienen serios inconvenientes para vivir el día a día en Bolívar. Padres y allegados reclaman la falta de rampas en dependencias municipales y espacios públicos.

A veces las realidades se manifiestan con su errónea naturalidad, por ejemplo que los derechos a la accesibilidad de las personas con discapacidades en bolívar, parecen son invisibles. En Bolívar no está en agenda la problemática de las personas con discapacidad, desde su integración con los demás, su derecho a estudiar, trabajar y recreativo.

La gestión municipal ofrecer servicios o productos, que cuando llega el momento de usarlos, solo pueden ser usados por personas «normales» porque a cualquiera que tenga mínimas restricciones físicas y/o psíquicas, le será imposible su uso y tampoco se le ofrecerán otras posibilidades. Madres con sus niños, ancianos, y personas con discapacidades motoras son los mayores damnificados.

Esta semana una joven mujer de Bolívar que tiene problemas de motricidad fue a la oficina de la Dirección de Cultura a anotarse para estudiar un curso de fotografía que la dirección ofrece y no pudo ingresar por la falta de rampas. La persona que la acompañaba entró al lugar para realizar el reclamo y no obtuvo respuesta.

Los padres de la joven contaron que desde hace más de diez años reclaman por rampas de acceso y baños inclusivos. Ellos solicitan que se derriben las barreras arquitectónicas de la ciudad, porque estas imposibilitan a su hija de desarrollar una vida normal.

Cabe señalar que los reclamos sociales en la ciudad son pronunciados en el tiempo, pero esta vez es momento de que el eco llegue ala casa comunal. Son varias las familias bolivarenses que denuncian que esta situación discriminatoria, asimétrica y discriminatoria se repite en todos los comercios.

La configuración arquitectónica de Bolívar no facilita, ni ayuda. Para las personas con capacidades diferentes, en todo caso, las dificulta y las excluye. Es hora de prestar atención y fomentar una inclusión social holística, para que los derechos sean para todos.